Una mañana del día 16 de julio del 2021, siendo las 9:30 am, comenzó la experiencia más maravillosa que he vivido en los últimos tiempos, de algo que me apasiona y que no esperaba que sucediera en ese momento. Me dirigía a despachar un vuelo hacia salgar con mi compañera Isabella la cual tenía una actitud muy sospechosa durante toda la operación. A pesar de que, en repetidas ocasiones le consulté sobre su actitud, ella evadía el tema y esto me llenaba de más intriga.
Llegado el momento del despegue nos encontrábamos en plataforma, camino a la aeronave, para embarcar a los pasajeros; fue en ese momento cuando uno de ellos manifiesta la siguiente inquietud:
EL PASAJERO: Quien será la persona que irá con nosotros?.
YO: La verdad, ninguna de nosotras está programada para ello.
Lo que yo no sabía era que mi compañera ya tenía todo planeado con ellos.
ISABELLA: Gise, “súbete… es tu oportunidad”.
La verdad no podía creer lo que estaba pasando y, por cuestión reflejo, contesté que no. Ella me empuja y repetía que me subiera y, sólo hasta ese momento, entendí que Fly Colombia me estaba obsequiando la oportunidad de vivir un sueño… de hacerlo realidad.
![](https://tourenhelicoptero.com/wp-content/uploads/2021/08/Gisela-Gutierrez.jpg)
No tengo palabras para describir todo lo que sentí en ese vuelo: El no tener los pies en la tierra, observar paisajes inigualables desde una perspectiva completamente distinta, los colores, formas y diversidad de nuestra naturaleza, ver la bella ciudad de Medellín desde los aires y luego contrastarlo con campos llenos de café en un abrir y cerrar de ojos.
Ser tripulante de cabina de pasajeros es una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida, para ello me preparé, para ello vivo.
Agradezco a Fly Colombia, a Don Diego y a Doña Cristina por darme la oportunidad de hacer parte de esta gran empresa y por ayudarnos, a todo el equipo, a hacer realidad uno de los sueños más esplendidos de la humanidad, el sueño de volar.