Historia del helicóptero y cómo Fly Colombia lo integra al turismo.

INICIAMOS EN 1500…

1500: el artista italiano Leonardo Da Vinci hizo dibujos donde se ve un artefacto volador con rotor helicoidal.

1840: el científico inglés Josh Kaylie, empezó a abordar uno de los obstáculos asociados con el vuelo rotatorio, (La neutralización del par motor) cuya respuesta fue diseñar un helicóptero con dos rotores situado uno frente al otro, donde cada rotor giraría en dirección opuesta para neutralizar las fuerzas del par motor entre los dos, pero Kayli nunca llego a diseñar su aeronave real ya que sabía que una aeronave con este diseño nunca se elevaría del suelo.

1860: Gustave Ponton D’Amécourt un ingeniero francés, estaba decidido en mostrar al mundo que el vuelo rotativo era posible, construyó una aeronave rotativa en miniatura que utilizaba un nuevo método para neutralizar el par motor (método coaxial del par motor) se basaba en dos rotores montado en un eje común, demostró que era posible el invento, un nombre que ha perdurado hasta el día de hoy, usando las palabras griegas (Helix) que significa «ala» y (ptero) que significa «espiral» compuso el nombre «helicopter»

1907: Louis Charles Bréguet, pionero francés de la aviación, se convirtió en el primero en elevarse desde el suelo verticalmente, se mantuvo en su aeronave por 1 minuto elevado, pero no tenía el control de la aeronave por lo cual está estaba anclada al suelo para mayor seguridad.

1907: Paul Cornu, ingeniero francés hizo historia en la aviación manteniendo a la altura de 1 FT por varios segundos, se convirtió en la primera persona en elevarse de manera vertical en una aeronave con motor sin ninguna asistencia en tierra, fue un vuelo rotario real, sin embargo, el control de la máquina seguía siendo escaso.

1909: Sirkorsky diseñó su primer helicóptero, aunque tiempo más tarde se determinó que nunca volaría.

1925: Juan de la Cierva, ingeniero español, recuperó la idea del helicóptero para desarrollarla, su invento, un nuevo tipo de aeronave (el autogiro) dotado de un rotor que cuando la aeronave se mueve hacia adelante a través del aire, el rotor actúa como un molino de viento en el que el movimiento de avance de la aeronave provoca su rotación convirtiéndose en un ala y provocando su elevación, pero el movimiento hacia atrás está producido por un propulsor muy similar al de un avión.

En los años 20, Juan de la Cierva demostró que para un aterrizaje seguro en un helicóptero no era necesario potencia alguna del motor ni pista de aterrizaje, solo un espacio suficiente para la aeronave.

La clave de la estabilidad del autogiro de la cierva, fue el descubrimiento de un fenómeno sólo presente en aeronaves de ala rotatoria (la asimetría de elevación), pero de la cierva tuvo el mismo problema que muchos diseñadores de helicóptero, sus aeronaves volcaban antes de elevarse debido a que las aspas de los rotores eran rígidas y nunca generaban la misma fuerza de elevación equivalente a sus revoluciones lo que causaba un desequilibrio en la subida.

La solución de de la cierva fue unir cada aspa dotadas de tecnología para que se movieran arriba y abajo para que estas encontrarán su camino en el aire.

1930: se desarrolla el control cíclico de balanceo y cabeceo, basado en el problema resuelto de asimetría de elevación donde la idea era controlar el desequilibrio en la subida y utilizarlo para equilibrar la aeronave, es el mismo mecanismo que permite el control de la aeronave (palanca giratoria) utilizada en los helicópteros modernos y lo que hace es que al mover esta palanca giratoria un mecanismo en la base del rotor altera la inclinación de cada aspa de forma individual durante su ciclo natural de rotación, cuando la inclinación del aspa es mayor, esta abarca más aire elevándose, cuando es menor, el aspa se mueve hacia abajo debido a la inferior presión de aire.

El efecto global del sistema, es el cambio en el plano del rotor que permite el control direccional de la aeronave, así funcionan los helicópteros hoy en día, los cuales poseen un mando colectivo de elevación; La palanca, que cambia la inclinación de todas las aspas del rotor simultáneamente y de este modo, el piloto puede elevarse verticalmente, controlar el aparato y con la palanca giratoria controlar los desequilibrios de las fuerzas de elevación.

1942: surgen los primeros helicópteros creados por el ingeniero Ucraniano Igor Sirkorsky a quién se le atribuye igualmente la invención de estas aeronaves que años más tarde se convierten en marca.

1962: se da el primer vuelo de los helicópteros Bell que son una familia de helicópteros con dos palas en el rotor principal, de 1 o 2 motores, producidos por Bell helicopter en su fábrica de Mirabel, Quebec, Canadá y en 1967 fueron introducidos al mercado los primeros Bell 206A.

1988: llegaron los primeros Black Hawk a Colombia las aeronaves utilizadas por las fuerzas armadas colombianas, su gran maniobralidad y la capacidad de mantenerse estáticos en el aire permitió que el ejército realizara diferentes actividades como, rescate, combate y ayuda humanitaria las cuales están vigentes aún.

La posibilidad de volar a una menor altura y a menor velocidad, hace posible que este tipo de aeronaves sean utilizadas para el reconocimiento de territorios y apreciación de paisajes.

2013: nace Fly Colombia City Tour paseos en helicóptero, una propuesta innovadora que estandariza un destino y lo sitúa a la par de grandes capitales del mundo, donde este tipo de servicios es común, la idea nace producto del pensamiento de dos apasionados de la aviación, quienes decidieron transformar la propuesta turística en innovación para la ciudad de Medellín y democratizar la oportunidad de acceder a este tipo de servicios integrando una propuesta experiencial e innovadora a la oferta turística de la ciudad, creando historias y cumpliendo sueños.

Nuestras experiencias se viven y se sienten en el Bell 206 L 3 de la familia Bell.